La observación de aves es una práctica accesible para todos, siempre y cuando se respeten algunos principios básicos imprescindibles. Por lo tanto, no es necesario ser un experto en ornitología para admirar la fauna salvaje. Descubra las reglas de oro para observar aves.
Salir en los horarios más propicios para la observación de aves
«El mundo pertenece a quienes se levantan temprano.» Este dicho se adapta perfectamente a la observación de aves. De hecho, el pico de actividad de la mayoría de las especies ocurre en las dos a tres horas posteriores al amanecer. La mañana también es un periodo propicio para escuchar los cantos.
Sin embargo, tenga en cuenta que algunas aves son crepusculares, lo que significa que son mucho más fáciles de observar al anochecer.
Por el contrario, si busca observar rapaces o cigüeñas, apueste más bien por las horas más cálidas del día. De hecho, las grandes planeadoras aprovechan las corrientes térmicas ascendentes para ganar altitud con menos esfuerzo.
A tener en cuenta: las especies de aves que habitan en un entorno determinado pueden cambiar a lo largo del año según los periodos de reproducción, invernada y migraciones.
Prestar atención y mantenerse bien concentrado
©Foto de Ryan Magsino en Unsplash
Siempre que preste atención, escuchará al ave mucho antes de verla. Para los ornitólogos, el canto permite no solo localizar al ave, sino también identificarla, lo que se denomina identificación por oído. Sin embargo, esta práctica requiere mucho entrenamiento.
En las especies aviares, el canto o el grito se utiliza para atraer a una pareja o reclamar un territorio. Durante una excursión ornitológica, también permite localizar al animal oculto en la vegetación.
Para localizarlo con certeza, preste especial atención a cualquier signo de agitación en los arbustos, árboles, setos, etc.
Ser lo más discreto posible para observar aves
La mayoría de las aves son tetracromáticas, lo que significa que son capaces de percibir más colores que el ser humano. Por ello, es preferible optar por ropa de colores discretos, de preferencia tonos pastel y poco contrastados.
Además, haga el menor ruido posible para no asustar a sus sujetos de observación:
- Evite las mochilas voluminosas que chocan con cualquier obstáculo.
- Evite la ropa que roce ruidosamente, como los K-way.
- Ponga su teléfono móvil en modo silencioso.
- Evite las conversaciones y los gritos.
- Prefiera excursiones en grupos muy pequeños.
Además, cuando detecte la presencia de un ave, evite detenerse bruscamente para sacar sus binoculares de la mochila. Es preferible seguir avanzando suavemente, para ocultarse detrás del primer escondite disponible (un arbusto, un árbol, una roca, etc.).
En general, los movimientos lentos y silenciosos serán menos notorios para las aves, lo que le permitirá observarlas a placer en sus momentos de intimidad (alimentación, acicalamiento, cantos, etc.).
Por último, resista la tentación de acercarse demasiado al ave silvestre que está observando, ya que probablemente se alejará volando junto con toda su familia oculta en los alrededores. Es fundamental respetar la fauna salvaje para no perturbarla en su vida cotidiana.
Equiparse con el material de observación adecuado
Binoculares, guía de identificación, cuaderno de notas... para disfrutar plenamente de la fauna silvestre, equípese con el material adecuado.
Los binoculares
Equipo indispensable para cualquier ornitólogo aficionado, el par de binoculares permite observar aves durante largos periodos sin asustarlas. Esta herramienta tiene la gran ventaja de ocupar muy poco espacio y los modelos actuales son lo suficientemente ligeros para no resultar incómodos.
Opte preferentemente por binoculares en las gamas 8X40 o 10X40, considerando también su peso.
El telescopio terrestre
Instrumento óptico monocular potente, el telescopio terrestre permite alcanzar aumentos mucho mayores que los binoculares. De hecho, es el único instrumento que permite la identificación de especies a una considerable « distancia de huida », como las aves acuáticas y las rapaces. Este equipo avanzado es generalmente más apreciado por especialistas y entusiastas de la ornitología, ya que requiere llevar un trípode.
La guía de identificación
El libro de identificación es un accesorio tan indispensable como un buen par de binoculares. En efecto, le permite identificar las aves que encuentra durante sus salidas de observación. En sus páginas se encuentran los nombres de las diferentes especies, sus características físicas, así como indicaciones valiosas sobre las temporadas y regiones propicias para la observación.
El cuaderno de notas
Como equipo adicional, no olvide llevar consigo un pequeño cuaderno de notas. Este resulta muy útil para anotar cada una de sus observaciones y así mejorar su capacidad para identificar especies.
Identificar las poblaciones aviares observadas
Observar un ave no es un fin en sí mismo. Lo ideal es lograr identificarla . Para ello, hágase algunas preguntas imprescindibles:
- ¿Su pico es afilado, corto, ganchudo, grueso...?
- ¿La forma de su cola es ahorquillada, redondeada...?
- ¿La forma de sus alas es redondeada, puntiaguda…?
- ¿Vuela ondulando, en línea recta, o se mantiene en el mismo lugar…?
- ¿Cómo se comporta?
- ¿Vive cerca de una extensión de agua, en el bosque, en llanura...?
Anote cada una de sus respuestas en su cuaderno de notas. Así podrá tomarse todo el tiempo necesario para consultar su guía de identificación una vez que el ave esté fuera de vista.
Consejo: identificar un ave requiere un conocimiento preciso de las diferentes partes de su cuerpo (manto, rémige, infracaudal, etc.). No dude en practicar con los ejemplares que ya conoce muy bien, como los de su propio jardín, por ejemplo.
Coloración y características visuales
El plumaje de las aves ofrece colores especialmente vivos y fácilmente identificables. Cuando observe a una de ellas, concéntrese en las distintas pistas que proporcionan sus plumas, tales como:
- sus colores dominantes;
- el contraste entre la cabeza y el dorso;
- la ceja y el anillo ocular;
- las rayas en los flancos;
- las posibles manchas en el pecho;
- las posibles barras alares;
- los patrones de la cola;
- y las marcas en la rabadilla.
Preste también atención a los colores de las partes desnudas del ave, es decir, su pico y sus patas, ya que también son valiosas pistas de identificación.
Nota: en caso de dudas, espere el tiempo suficiente para ver al ave volar. Los colores de las alas desplegadas le ayudarán a evitar cualquier confusión.
Tamaño
Existen aves de todos los tamaños. Así, si el colibrí mide unos 5 cm y pesa menos de 2 g, el cóndor de los Andes tiene una envergadura de más de 3 m y puede pesar hasta 15 kg. La estimación del tamaño y del peso es por tanto una indicación valiosa para la identificación de las especies observadas.
Algunas precauciones indispensables
Algunos principios de precaución deben observarse antes y durante sus excursiones de observación ornitológica.
- Defina su itinerario en función de su condición física (los accidentes suelen estar relacionados con un mal estado de salud y/o un equipo inadecuado).
- Equípese con calzado adecuado para su recorrido, que ofrezca una comodidad óptima y buen soporte para los tobillos.
- Lleve un teléfono móvil, agua, comida, una prenda de abrigo, gafas de sol, un sombrero, protector solar y una bolsa de basura en su mochila.
- Infórmese sobre los periodos de caza en su zona de observación, especialmente si se trata de un entorno forestal.
- Piense también en consultar las previsiones meteorológicas.
- Si se desata una tormenta durante su salida, no se refugie bajo un árbol ni en una cueva y aléjese de las estructuras metálicas (torres eléctricas, cercas, etc.)
- Respete los lugares llevando consigo todos sus residuos.
- Mantenga a su perro con correa para que no se aleje del sendero y así evitar molestar a la fauna silvestre o al ganado (y no arruinar sus oportunidades de observar aves).
